DOMINGO XXXI del Tiempo
Ordinario
LA ALEGRÍA DE LOS HIJOS DE DIOS (Amigos de Dios, nn. 108-109)
No concedáis el menor crédito a los que presentan la virtud de la
humildad como apocamiento humano, o como una condena perpetua a la tristeza.
Sentirse barro, recompuesto con lañas, es fuente continua de alegría;
significa reconocerse poca cosa delante de Dios: niño, hijo. ¿Y hay mayor
alegría que la del que, sabiéndose pobre y débil, se sabe también hijo de Dios?
¿Por qué nos entristecemos los hombres?
Porque la vida en la tierra no se desarrolla como nosotros personalmente
esperabamos, porque surgen obstáculos que impiden o dificultan seguir adelante
en la satisfacción de lo que pretendemos.
Nada de esto ocurre, cuando el alma vive esa realidad sobrenatural de su
filiación divina.
Si Dios está por nosotros, ¿quién contra nosotros?. Que estén tristes los que se
empeñan en no reconocerse hijos de Dios, vengo repitiendo desde siempre. (.)
Mirad a María. Jamás criatura alguna se ha entregado con más humildad a
los designios de Dios. La humildad de la ancilla Domini, de la esclava
del Señor, es el motivo de que la invoquemos como causa nostrae laetitiae,
causa de nuestra alegría.
TEMAS DE
DOCTRINA CRISTIANA
Los Símbolos
de la fe (catecismo)
¿Qué son los Símbolos de la fe o Credo?
Desde su origen, la Iglesia apostólica expresó y transmitió su propia fe
en fórmulas breves y normativas para todos (puede verse Romanos capítulo 10,
versículo 9 y 1 Corintios 15, 3-5).
Pero muy pronto, la Iglesia quiso también recoger los esencial de su fe
en estos resúmenes destinados sobre todo a los candidatos al bautismo.
Son una recopilación de las principales verdades de la fe y punto de
referencia primero y fundamental de la catequesis. (cf. nn 185-188)
¿Cómo se pueden resumir los
Símbolos de la fe?
En 3 partes: Creo en
1) Dios Padre y la admirable obra de la Creación;
2) El Verbo de Dios, Jesucristo, y el misterio de la Redención de los
hombres y
3) El Espíritu Santo fuente y principio de nuestra santificación. (cf. n. 190)
¿De donde se han sacado estas
síntesis o Símbolos de la fe?
No han sido hechas
según las opiniones humanas, sino que de toda la Escritura a sido recogido lo
que hay en ella de más importante, para dar en su integridad la única enseñanza
de la fe.
Y como el grano de
mostaza contiene en un grano muy pequeño gran número de ramas, de igual modo
este resumen de la fe encierra en pocas palabras todo el conocimiento de la
verdadera piedad contenida en el Antiguo y el Nuevo Testamento. (San Cirilo de
Jerusalén). (cf. n 186)
¿De dónde viene la palabra
Símbolo?
Es una palabra griega que significaba la mitad de un objeto partido (por
ejemplo un sello) que se presentaba como una señal para darse a conocer. Las
partes rotas se ponían juntas para verificar la identidad del portador.
El “símbolo de la fe” es, pues, un signo de identificación y de comunión
entre los creyentes. (cf. n. 188)
AL COMIENZO DEL AÑO DE FE
En qué consiste
la nueva evangelización (2)
¿Por
qué evangelizar significa dar a conocer a Jesús?
Porque Jesús interesa siempre y su vida no deja de
impresionar.
Porque nuestro gran aliado es la verdad única que hay
en sus palabras y en su vida (Yo soy la Verdad).
Cuando explicamos la verdad, el que escucha tiene algo
dentro que le dice que ha de estar en sintonía con la verdad.
¿Cómo hablar con sus palabras?
Si tratamos de vivir lo que Jesús dice es
fácil hablar de lo que vivimos.
Él es lo más importante en nuestra vida,
quien ha configurado el mundo en que vivimos: es imposible entender el mundo
cultural de hoy sin Jesucristo.
¿Qué hacer
para hablar de Jesús con esa naturalidad?
Tener una profunda sed de Jesucristo, viviendo cada escena del Evangelio
como un personaje más (…).
Lograr esta actitud de oración y
de recogimiento interior frente al Evangelio para que incida realmente en
nuestra vida cotidiana (…).
Cuidar la lectura bien hecha, es decir realmente vivida, de los textos de
la Misa, no como una declamación, sino con la certeza de que Dios nos está
hablando. (Mons Javier Echevarría, Prelado del Opus Dei)
¿Qué otra ayuda tenemos?
Conocer y vivir la Misa. Por la Eucaristía
Cristo vivo viene a nosotros y toma posesión de nosotros.
Así la Eucaristía hace posible que el
cristiano sea “otro Cristo”, “Cristo que pasa” (San Josemaría)
Algunas ideas y textos son del Prof. Pedro Rodríguez en www.primeroscristianos.com